domingo, 29 de julio de 2012

Nueva Entrada: FUGAZ, HERRRMANOS.

Hola camaradas.


Tranquilos, no me agobio porque nadie me lea, total... este blog no lo hice para que a la gente le preocupe leer mis entradas cuando en realidad luego me pregunto ¿DÓNDE TENÍA LA CABEZA para creer que escribir ese tipo de cosas estaba bien?.

Bueno, ahora si les platico... se supone que debería estar dormida... pero aquí sigo porque ando de chismosona que no me aguanto.
Primero que cualquier cosa... les cuento algo muy triste: He terminado por segunda vez mi libro del "Diario de Ana Frank", aunque a veces pienso que esta vez la siento más real en cuento a sentimientos, que anteriormente.
Pero no, no me hagan caso. Era yo quien no aguantaba acabar el libro la primera vez que lo leí.

Es cierto, cuando lees los libros varias veces, siempre encuentras más conexión y nuevas cosas que antes nunca notaste.
Pero tengo tanta tristeza... tuve una conexión con Ana, un entendimiento completamente elevado con lo que sentía sin sentirme tampoco tan igual a ella, porque es claro que iguales nunca fuimos, ni somos, ni seremos. 



Le tengo un gran, gran respeto a Ana y a su forma de ver la vida, la naturaleza, la amistad, la familia, la guerra, la educación, el amor, entre otras cosas.
Sin embargo, esta vez, sus miedos me hicieron sentir empatía, cariño de una amiga que solo quería acompañarla y aconsejarla en lo mejor, o al menos, en lo que yo pensaba que ella podría necesitar.

Ahora creo más en cosas que antes ni me hubiera dignado a mencionar. Muchas cosas por aprendizajes pasados, y sobre todo... ahora creo en mí.

Claro que tengo miedo de no alcanzar mis sueños, de no encontrar al indicado cuando pensaba que ya lo había hecho, en la muerte, en la crueldad, en la injusticia, etc.

Pero es enserio lo que les digo, esta vez, Ana me hizo sentir que ella era la que sentía empatía por mí, sin que mencionara mi nombre o algo.

La primera vez que leí el libro, al terminarlo JURÉ que era la biblia de cualquier niña. Pero no, Ana no es cualquier niña y por lo tanto, siento feo decirlo, pero no "cualquier niña" podría comprender lo que Ana trata de manifestar en lo que escribe.
No sé como explicar todo lo que ella significa para mí sin mencionar lo que aportó al mundo.
Es inmenso el amor y cariño, pero sobretodo el RESPETO que tengo hacia ella. Y simplemente no puedo escribirlo todo. 



No quería acabar el libro y me tardaba a propósito porque ya me sabía el final y no es algo agradable de imaginarse. Sin embargo, si no ya lo dije, lo repito, anoche lo terminé y casi muero de llanto al leer "Edith Frank" y recordar todo lo que estaba escrito sobre su madre, y tratar de imaginarme tan solo el ver a la mamá de Ana morir, cuando muchas veces Ana hablaba sobre eso, y yo... yo no pude. 

Es por eso, que, volviendo al tema, si es que en eso estábamos, yo respeto cada cosa que Ana escribió y luego se arrepentió . Es algo natural y es algo que yo necesito aprender. 
Así que si le pudiera decir algo a Ana ahorita, la abrazaría y le diría que no tiene idea de todo lo que significa y significará para la eternidad el nombre de "Ana Frank" para el mundo, pero sobre todo... para mí. Porque en ella, he encontrado soluciones que jamás me hubiera planteado sin su ayuda.
A confíar en mí, a ser feliz. A ser fuerte. Y a que no estoy sola, aunque así lo crea. A que hay fe... sí, en mi corazón; y con esa basta. A que agradezca y a que no me sienta menos que los demás, porque yo también lo valgo. A que uno puede estar en lo correcto, y el otro también.
Y sobre todo, a que SIEMPRE CAMBIAMOS.

Así que triste, pero con mucho agradecimiento a Ana Frank; solo puedo citar algo que no sé (y con mucho respeto lo digo) si Miep Gies sigue con vida, dijo en una entrevista a Steve North en Enero del 2010:



 “This is the kind of child I’d like to have someday.”


Así que me voy, sin más que teclearles debido a mi mano derecha dormida de escribir de esta forma, pero con mucho que desahogarme.

Nos veremos en otra vida, o tal vez no, ¡¿QUÉ DIABLOS?!




Byeeeee (: 
Atte- Isabel. 

 

¡Qué mirada! Con razón era tan pretendida. Qué niña tan especial.

A propósito, esta foto es mi favorita. La amo, era divina.



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